Al
presidente de la Junta de Castilla y León.
Señores:
Soy
português y por lo tanto todo lo que se pasa en el mundo me
interesa. Además si se pasa en Tordesillas, tierra de gente
buena con una história común a los dos Estados de la
Península Ibérica, mayor es mi interés. Creo que sé por que
han vosotros, del Gobierno de Castila y León, prohibido el
Torneo del Toro de la Vega. La verdad es esta:
"A
finales del siglo XV D. Juan I de Portugal y los Reyes
Católicos de lo que és hoy España, eran grandes jefes de
Estado que lideraban sus reynos que, por su vez, dominavam
el comércio mundial. Para "reglar" la situación mundial,
decidiran organizar un encuentro para firmar un tratado que
dividia el mundo entre la parte portuguesa y la parte
castellana. Pero estaba difícil de entenderse sobre donde
colocar la raya. Entonces, alguién se acordó de organizar un
Torneo con un Toro en la Vega del Duero en Tordesillas. Se
ganaría la pelea el Rey que matara, con su lanza, a un
enorme e poderoso toro en su terreno y dandole todas las
vantages. Se por acaso ni Juan ni Fernando lo mataran, el
mundo cambiaría en el caos. El Rey português se llevó la
victória, matando al Toro de una buenissima lanzada, con
mucho aguante e mucho corazón. Fue por eso que, en el
tratado, Portugal se quedó con la parte de León: África,
Oriente extremo y, además, Brasil en América. Ahora, más de
500 anos volvidos, deciden ustedes atuar de forma vengativa
y punir Tordesillas con la proibición del Torneo del Toro de
la Vega, de una manera que, además de estúpida, es cobarde,
porque representa una cedência a los movimientos de los
animalistas talibanes contra vuestro proprio pueblo".
¿Es
absurda la história que termino de contar? Si, claro. Pero
no más absurda que vuestra actitud cobarde. Yo conozco muy
bien al Torneo del Toro de la Vega, de cujas reglas y
sentidos soy testigo, y creo que el Pueblo de Tordesillas,
para el cual esta fiesta es toda una manifestación de
valores solidarios y de coraje, se identifica con esta
fiesta como la cosa más preciosa que tienen, su propia alma.
Nada
puede quitar el alma de un pueblo y vosotros ides a tener
muchos problemas. Yo estaré en Tordesillas, una vez más, con
mis amigos valerosos y de verdad. Todo el contrário de
vosotros, pequeños seres sin méritos ni valor.
Viva
el Toro de la Vega e viva la amistad entre los pueblos que
respectan sus valores y su identidad.