Recibida
en esta Redacción carta del Ayuntamiento de Arenillas para su
difusión, así lo hacemos agradeciendo a ese ayuntamiento la
solidaridad que muestra con Tordesillas.
El
Ayuntamiento y alcalde de la villa de Arenillas a los alcaldes de
las ciudades, villas y lugares donde corren toros como Dios manda (a
los otros, no).
Excelentísimo e Ilustrísimo señor alcalde de ……. (donde corresponda)
y colega en gobiernos y toros: Le adjunto acta del acuerdo municipal
tomado por el ayuntamiento de esta villa de Arenillas, al objeto de
que si fuera voluntad de sus vecinos, adopten en la … (ciudad, villa
o lugar, como corresponda) las providencias tomadas por éste de
Arenillas pa instaurar de una santa vez la justicia y terminar la
bobada con la que nos molestan llegadas estas fechas a las personas
de bien.
ACUERDO DEL
AYUNTAMIENTO DE LA MUY NOBLE VILLA DE ARENILLAS
"En la muy noble villa de Arenillas a 20 días del mes de septiembre
año de 2.015, reunida la justicia y regimiento en concejo abierto a
son de campana tañida como lo tiene de uso y costumbre inmemorial en
la Taberna del Ahorcado bajo la presidencia del sr. alcalde, yo, el
secretario escribano, doy fe de que tras tocar el cuerno a silencio,
dijo el sr. alcalde.
-
Vecinos, venimos de Tordesillas, del II Congreso
Internacional del Toro Vega y venimos horrorizaos. ¿Sus
acordáis de la manifestación de Valladolid?, pues me dicen
que el tío propietario de la plaza de toros no autorizó a
leer el manifiesto de apoyo al Toro Vega.
Los presentes
prorrumpieron en gritos de: ” Sinvergüenza!. Sinvergüenza.
Sinvergüenza!”.
Tras dar el
sr. alcalde tres golpes con su cayada en la mesa para pedir
silencio, dijo:
-
También me dicen que los del Patronato hablaron con el tío
de la plaza de toros de las Ventas, la de Madrid, pa
presentar allí el II Congreso y el mu degenerao les mandó
ande os imagináis y a mayores les dijo que no querían saber
nada del Torneo. Pa amolarlo del todo, una individua que
atiende por Cristina Cifuentes y es la jefa de Madrid, se
subió a la mula del Pedro Sánchez pa decir que también lo
quiere prohibir.
Los presentes
comenzaron a cantar:
“Que le coorten el raaboo,
con uun serrucho,
que le coorten el rabo, que tieene mucho,
le cortaron el raabo!. Ay!. Qué dolor!
Le cortaaron el rabo, y se murió!”.
Finalizada la copla, comenzaron palabras fuertes entreveradas con
blasfemias que el sr. cura recriminó dando tres cayadazos en el
mostrador de la taberna con todo éxito. Diciendo:
-
Hijos, Dios y yo os entendemos, pero no aparentéis ser
urbanitas degenerados en vez de hijos de esta noble villa.
Acto seguido,
el sr. alcalde dijo:
-
Bueno, pues yendo al grano; considerando que los susodichos
se meten ande no les llaman, pretenden robarnos lo mas
precioso, que es nuestra tradición, nuestra libertad y vivir
como nos parezca a nosotros y no a los de la televisión; y a
mayores de despreciarnos nos amenazan y ofenden, ha acordado
este ilustrísimo ayuntamiento:
1º. que si la
villa lo tiene a bien, sean declaradas personas non
gratas los dos músicos de las plazas de toros y los
dos danzantes políticos, prohibiéndoles la entrada
en esta villa so pena de ser desnudados, emplumados
y arrojados al pilón por la primera vez.
2º. Que en vez de
Radio Televisión Española pongan: Radio Televisión
Española menos Arenillas.
3º. Comunicar
este acuerdo a los ayuntamientos de Tierra de
Campos, Pinares, Las Sierras, Sorianos y demás pa
ver qué les parece y que apliquen esta justicia en
su jurisdicción.
De entre los
presentes, dijeron: “sois unas madres. Vaya autoridad!”.
“Guerra!. Guerra a sangre y fuego!”. “Danos un vaso pa celebrar la
justicia” y otras muchas sentencias que por la algarabía no fue
posible anotar.
Otro dijo:
-
“sr. alcalde, si no tenemos pilón, ¿ande les tiramos?”.
A lo que
respondió el sr. alcalde:
-
Pos mañana a los ocho los mozos de hasta 35 años se
presentarán en la plaza con palas y picos pa hacer el hoyo;
los casados, con hormigonera; los hombres con tenazas pa
atar la ferralla; los viejos, con papel y lápiz pa dar
órdenes, las mujeres con pintura plástica pa adecentar la
obra y el cura con sus útiles pa bendecir el pilón de a 1
vara de hondo a última hora de la tarde. Al día siguiente ,
tendremos incierro de cuatro utreros pa celebrar la
inauguración al estilo de la villa. ¿Hay más preguntas o
quejas?. ¿No?. Pues entonces. ¿Se aprueba?.
Y aplaudiendo
fuertemente el público, entendió la Justicia quedaba aprobado. Acto
seguido, el sr. alcalde dijo:
-
Tabernero, sirva al pueblo un vaso de vino de los que paga
la Diputación Provincial, que vamos a brindar por El Toro
Vega y por la libertad y las costumbres de Castilla.
A lo que
respondió Gervasio Negro, tabernero:
-
Es que luego la Diputación no me lo paga; me dicen que pa
vinos, nada; y que a los niños no se les puede dar vino, que
hay que darlos refrescos y sube mucho la factura.
A lo que
respondió, el sr. alcalde:
-
Gervasio, cuando en esta villa se celebran graves negocios
públicos, los niños brindan con vino, como hacemos desde los
tiempos de los hombres prehistóricos. Pa cobrar, te vas con
el secretario, llegais a Valladolid, pedís los 200 euros y
no os enredéis. ¿Que os les dan?, sus mostrais agradecidos
como cumple. ¿Qué no sus les dan?, pues cogeis un
funcionario, sus le traéis pacá y le pones a servir al
mostrador de la taberna hasta que te hayas cobrado. Asín que
no pongas disculpas.
Y ya que vais, amañad algo mas pa traer a los Pepes de
Benavente a amenizar la función, que este verano andan mu
finos.
A lo que
respondieron los niños presentes con fuertes:
-
¡Viva el Ayuntamiento!. ¡Chotas, chotas, chotas!.
A lo que
respondió, el sr. alcalde:
- !Tres
chotas para los niños en la función de inauguración!.
Tras largo
rato de alboroto, el sr. alcalde brindó por los conceptos susodichos
siendo respondido con fuertes vivas, procediendo a finalizar el
concejo a las 14,34 horas. De lo cual yo el escribano secretario,
Eustaquio Cembranos, doy fe. Sirva a efectos legales como relación
de testigos la fotografía adjunta, porque solicitados para firmar,
estando como de broma, dijeron bastaba el retrato”.
Ya sabe ese
ayuntamiento lo que hay por aquí. En espera de sus gratas noticias,
queda a su disposición el ayuntamiento y villa de Arenillas, que
besan su mano. Dios guarde a … (VE o VI, lo que proceda) tantos años
como le deseamos.